jueves, 22 de diciembre de 2011

UN MICRO NUEVO... SIN ESTRENAR

Aún nos quedan unos cuantos relatos en nuestra sala de espera que vamos guardando para la semana próxima… Hoy compartimos con vosotros, con vosotras, un relato de Miguelángel Flores de los que encontramos un escenario marcado por el contraste de una alegría desbordada en donde, a la vez, no cabe la esperanza.

SIN ESTRENAR

A cada campanada, me voy agachando más y más. Hasta hacerme imperceptible. Desaparezco hacia adentro. Todos comen uvas. Algunos, con la risa, las esturrean. Divertidos, otros se atragantan. El jugo chorrea por las comisuras. Cuando suena la última todos brindan y se abrazan. Entre gritos de júbilo se desean un feliz año. Yo me miro las manos. Aún tengo las doce uvas en ellas, no podría tragar ni una. Sentado en el suelo, en este rincón casi oculto, siento abierto el costurón del pecho. Y lloro porque tú este nuevo año ya no lo estrenarás.

3 comentarios:

  1. Emocionante Miguelángel, pone los pelos de punta y deja sin palabras.

    Un abrazo, FELIZ NAVIDAD

    ResponderEliminar
  2. De una poesía dura. Una muerte lírica.
    Un abrazo Miguel

    ResponderEliminar